martes, 25 de marzo de 2014

Los españoles solicitan ayudas económicas y los inmigrantes, información

Información, ayuda a domicilio, alojamiento alternativo, prevención e inserción y recursos complementarios de subsistencia son los diferentes programas que desarrolla el departamento de Servicios Sociales de Santa Eulària y en los que se distribuyen los usuarios en función de sus necesidades. El grupo de población que más información solicitó en 2013 fueron los inmigrantes (304 intervenciones), seguido de las personas mayores (209), según los datos facilitados. «La demanda que más hacen es información sobre los recursos sociales, documentación, tramitación de informes de reagrupación familiar o arraigo. Estos son sus temas específicos; no suele corresponder con la imagen general de que los inmigrantes saturan los Servicios Sociales demandando ayudas básicas», dice la coordinadora, Rosa Ferrer. Familias españolas. Los recursos complementarios de subsistencia se destinaron principalmente a las familias españolas –de Ibiza o llegadas de la Península para intentar salir de la situación de crisis que allí ya estaban viviendo– (241) y, en segundo lugar, a inmigrantes (187). Estos consisten sobre todo en «cobertura de necesidades básicas de alimentación», apunta Irene Descalzo, trabajadora social. Pero puntualiza que para acceder a ellas se realiza «un contrato terapéutico», un compromiso con el usuario en el plan de trabajo que se hace con él para solucionar su problemática. En el marco de esas ayudas económicas se ha atendido también a familias con «problemática de vivienda», si bien Ferrer aclara que en no tienen conocimiento «de que se haya tenido que recoger a nadie de la calle». A este respecto, y en colaboración con la Plataforma de afectados por la hipoteca (PAH), están preparando un protocolo de actuación: «Hemos tenido una primera reunión para hacer una puesta en común y ver si la ayuda que tenía el Ayuntamiento de 60.000 euros [destinada a gente desahuciada de su primera vivienda por impago de hipoteca] realmente respondía a la necesidad actual de las familias, y vimos que hacía falta otro tipo de ayudas». Ayuda a domicilio. Respecto a la ayuda a domicilio, las personas mayores y las familias que tienen «dificultades en su organización diaria» fueron las destinatarias principales (136 y 129, respectivamente), apunta Mari Carmen Amorós, otra trabajadora social. «Las trabajadoras familiares acuden al domicilio desde una hora a la semana o, en casos que necesiten más, incluso hasta 20. Allí ayudan a la familia a aprender habilidades de organización o de administración del hogar, pautas educativas entre padres y niños, hábitos, o si es una persona mayor encamada, se hace movilización, higiene...», relata Ferrer. Los beneficiarios del alojamiento alternativo fueron sobre todo personas sin techo y transeúntes (11). Ferrer explica que este grupo de población «se mueve bastante por la isla» y resalta que además en los meses de verano se suma gente de la Península. También se dio alojamiento alternativo a inmigrantes (5) y a mujeres (5), entre otros. La coordinadora de Servicios Sociales señala que esta ayuda incluye distintas opciones: hostales, pisos que gestiona la Oficina de la Dona, el albergue de Ibiza y «otras que puedan surgir o se crean necesarias». Programa de prevención para niños y jóvenes. Por último, el programa de prevención e inserción intervino sobre todo con niños (92) y jóvenes (73). «En estos casos se intenta abordar el absentismo escolar o desescolarización, casos de menores que en situación de riesgo familiar, desajustes familiares o convivenciales», indica Ferrer. Agrega que aunque se actúa también en casos de consumo de drogas, por ejemplo, la intervención «directa y específica» en este ámbito se hace desde el Centre d´Estudi i Prevenció de Conductes Addictives (Cepca) del Consell. En este sentido, hace hincapié en que en temas de prevención e inserción se realiza un trabajo conjunto: «La intervención suele ser de educadoras sociales y, en según qué casos se deriva a la psicóloga. Además, la gran mayoría de casos suelen estar coordinados entre trabajadoras y educadoras sociales». Actuar más allá de lo que piden. Las trabajadoras sociales de Santa Eulària reconocen que «normalmente» los usuarios que acuden al departamento con una demanda acaban recibiendo una ayuda diferente a la que pedían. «Sí es verdad que vienen con una demanda y que después de varias entrevistas, de valorar el caso y conocerlo, sí puedes percibir que lo que piden no es lo que realmente necesitan, o también, pero que siempre va acompañada de otras necesidades que conducen a esa», afirma Descalzo, y señala como ejemplo una petición de ayuda para comprar alimentos en la que se detectan problemas para la búsqueda de empleo. Un ´plan de trabajo´ personalizado. Para llegar a descubrir esto, las trabajadoras sociales realizan entrevistas personales al demandante y a otros miembros de la familia, hacen visitas a domicilio y analizan la documentación que les entregan. Con todo ello elaboran un «plan de trabajo». Según Descalzo, aunque no les den lo que pedían o no solo eso, los usuarios no se sienten molestos. «Nuestro trabajo también es que la gente se dé cuenta de que su necesidad sí puede ser ahora la alimentación, pero que hay otras», indica la trabajadora social. Y para resolver la situación suelen derivar a otros servicios con los que colaboran, como el Punt de Feina de Santa Eulària, Cáritas o Deixalles. «Un ejemplo quizás muy de los últimos años ha sido el de gente que no encontraba trabajo. Dicen: ´necesito trabajo, dame trabajo´. Esa es la demanda. Y en el proceso de intervención se detecta que a lo mejor necesita unas habilidades que antes no había necesitado porque el mercado laboral tenía capacidad para asumir a todo el mundo. Entonces haces el diagnóstico y dices: ´Pues mira, por aquí podríamos mejorar. ¿Qué te parece si vas a este servicio más especializado o a este curso donde te puedes formar?», relata Ferrer. «Y normalmente aceptan, porque ven que eso sí es lo que necesitan», apostilla Descalzo. fuenteshttp://www.diariodeibiza.es/pitiuses-balears/2014/03/24/espanoles-solicitan-ayudas-economicas-inmigrantes/683220.html

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