Detienen a un empresario por explotar inmigrantes en el puerto de Gandia

S. SAPENA GANDIA Un empresario de nacionalidad polaca ha sido detenido en Gandia por agentes de la Guardia Civil en el marco de una actuación abierta por el instituto armado tras haber detectado un caso de explotación laboral de inmigrantes que tenía lugar dentro del recinto portuario de Gandia.El detenido, de unos 50 años de edad y representante de una empresa de su país que trabajaba con otra de Murcia, introdujo en un almacén del puerto de Gandia a una veintena de inmigrantes rumanos, búlgaros, marroquíes y paquistaníes que fueron sorprendidos trabajando la noche de Reyes en el manipulado de fruta. Después ser requeridos para que presentaran una documentación laboral de la que no disponían, el empresario polaco intentó colar contratos de trabajo que estaban a nombre de otras personas y no de quienes llevaban a cabo el manipulado de fruta en el puerto de Gandia. Ese intento de suplantar la identidad de trabajadores sin contrato fue determinante para que la Guardia Civil optara por detener al hombre, que pasó a disposición judicial y ha sido puesto en libertad provisional acusado de fraude a hacienda y de un delito contra la seguridad de los trabajadores. Además de carecer de contrato, los inmigrantes eran sometidos a jornadas que se prolongaban desde las 8 de la mañana a las 9 de la noche por las que percibían entre 15 y 20 euros al día, iban vestidos con ropa de calle y su actividad se realizaba casi a escondidas, intentando que nadie les pudieran sorprender. Todo ello se ha podido saber de las propias declaraciones tomadas por la Guardia Civil a quienes son las víctimas de esta operación. Aun así, y como suele ocurrir muchas veces, los inmigrantes no han querido formular denuncia contra sus empresarios a pesar de haber sido informados de que tienen derecho a hacerlo. Su trabajo consistía en la manipulación de manzanas procedentes de Polonia que, compradas por la empresa de Murcia, eran embarcadas en el puerto de Gandia con destino a Argelia. El buque que debía transportar la fruta tenía fijada su salida para el martes 8 de enero, pero la mercancía se quedó en el almacén debido a la operación de la Guardia Civil. La investigación por este suceso sigue abierta, y en estos momentos se está procediendo a una serie de comprobaciones para saber si otras empresas pueden estar implicadas en esta presunta trama de explotación laboral. Lo que ha sorprendido de esta operación es que la contratación ilegal de trabajadores haya alcanzado tal grado de "normalidad" que sus autores ni siquiera tengan reparos en llevar a cabo este delito en las instalaciones de un puerto que es de titularidad del Estado donde, al menos en teoría, existe un control de acceso al recinto por parte de policía puesta por la Autoridad Portuaria de Valencia, que gestiona esta terminal marítima. fuentes http://www.levante-emv.com