sábado, 19 de enero de 2013

La Guardia Civil desarticula una organización dedicada al tráfico de inmigrantes entre Marruecos y Melilla

Se estima que en tan sólo dos meses se ha podido lucrar con 200.000 euros procedentes de los pagos que hacían los inmigrantes La Guardia Civil ha logrado desarticular una organización que se dedicaba al tráfico de seres humanos entre Marruecos y la ciudad autónoma. Según una nota remitida por el Instituto Armado, esta actuación se ha llevado a cabo en el marco de la Operación ‘Bugbuss’, que ha estado dirigida y supervisada por el Juzgado de Instrucción número 4 de Melilla. La investigación se inició a principios del mes de octubre de 2012 después de que la Guardia Civil detectara la proliferación de entradas de inmigrantes en Melilla que utilizaban fórmulas similares, lo que levantó sospechas entre los agentes y provocó el inicio de un intenso trabajo que dio sus primeros frutos a comienzos del mes de diciembre con la interceptación y neutralización de un vehículo con matrícula española en cuyo interior, concretamente en la zona del salpicadero, se halló un doble fondo que ocultaba a una persona de origen subsahariano. Como consecuencia de aquella actuación, se procedió a la detención de una persona provista de tarjeta de residencia comunitaria y vecino de Melilla, actualmente en prisión. La investigación concluyó hace unos días con la detención de las personas que conforman la parte principal de la organización, que estaba compuesta por personas de nacionalidad española y marroquí. La Guardia Civil estima que en el periodo comprendido entre el 7 de octubre y el 5 de diciembre pasado, la organización habría logrado introducir en la ciudad a más de 55 personas de origen subsahariano. Además, también ha podido saber que la cantidad que los miembros de la organización exigían a los inmigrantes para proceder a la entrada a Melilla oscilaba entre los 3.000 y los 4.000 euros a cada uno, lo que supone un beneficio económico aproximado en tan sólo dos meses superior a los 200.000 euros. La trama contaba con infraestructura en Melilla para llevar a cabo la extracción de los inmigrantes de los vehículos de forma segura. Para llevar a cabo sus actividades delictivas, los miembros de la organización se hacían con vehículos con matrículas españolas, donde habilitaban los dobles fondos. A este respecto, la Guardia Civil ha recordado que las organizaciones dedicadas al contrabando, tráfico de drogas o de personas utilizan esos vehículos para desarrollar su actividad delictiva tanto en territorio nacional como en Marruecos y que la responsabilidad de sus titulares, la mayoría ciudadanos españoles de origen, nacionalizados o con tarjeta de residencia en Melilla, sigue vigente tanto en el ámbito administrativo como penal, “ya que sin saberlo, forman parte de la organización criminal y que su participación es necesaria para perfeccionar el delito”. Por otra parte, la Guardia Civil estima que la parte de la organización asentada en Marruecos puede contar con más de un centenar de vehículos dispuestos para ser utilizados en cualquier momento y para la actividad que consideren oportuna. En definitiva, la operación ha concluido con la detención de tres personas que formaban el núcleo fundamental de la organización, aunque quedan fijados otros objetivos por parte de la Guardia Civil, con lo que no se descartan futuras detenciones. Los detenidos son, por un lado, un ciudadano de Melilla que ha pasado a disposición judicial y que actualmente se encuentra en libertad bajo fianza de 40.000 euros, y por otro lado, dos ciudadano marroquíes que ponían en contacto a las mafias marroquíes con la parte asentada en Melilla y participaba de actos necesarios para la consecución de los delitos. Uno de ellos se encuentra en prisión, mientras que el otro se encuentra en libertad “apud acta”. A todos ellos se les imputa el supuesto delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros, agravado al formar parte de una organización. fuentes http://www.infomelilla.com

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